«México nunca será colonia ni protectorado» AMLO en Puebla

Mayo 5 de 2024
Puebla, Puebla.-
México “se ganó, con el sacrificio, con el sufrimiento y con la sangre derramada de hombres y mujeres, su derecho a ser un país independiente y soberano”, por ello, no aceptará nunca ser una colonia o protectorado de ningún gobierno extranjero, trátese de Rusia, China, Francia o Estados Unidos, subrayó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al encabezar desde esta capital la conmemoración por el 162 aniversario de la Batalla de Puebla, el mandatario federal lo dejó claro: “Somos un país libre e independiente, esa es la condición fundamental, sí a la integración económica, sí a la cooperación, si a una relación de respeto, sí a una política de buena vecindad, sí a la amistad entre nuestros pueblos; pero sin olvidar nunca que México es una nación libre, independiente y soberana”.
En su discurso, rememoró que hubo varias invasiones e intervenciones extranjeras antes de la gesta histórica del 5 de mayo de 1862, cuando el Ejército de Oriente, al mando del general Ignacio Zaragoza, asentó un duro golpe al ejército francés, entonces el más poderoso del mundo.
“Nuestro país construyó el respeto a su soberanía con la lucha y el sufrimiento de varias generaciones de mexicanos; y enfrentó, como pocas naciones, traiciones internas de conservadores y prepotentes intervenciones extranjeras. Antes de la heroica Batalla de Puebla, que hoy conmemoramos, nuestro actual territorio ya había sido invadido y colonizado durante 300 años por la monarquía española”.
Tras la independencia, recordó, se dio un intento de reconquista de España, una primera invasión francesa en la llamada Guerra de los pasteles, y la de Estados Unidos, con la que se arrancó a México más de la mitad de su territorio.
“De modo que, cuando la invasión francesa de 1862, ya los mexicanos sabían que la defensa de la patria era cuestión de vida o muerte”.
Ello, enfatizó, explica en buena media por qué en la Batalla de Puebla no sólo lucharon los militares dirigidos por el general Zaragoza, sino que se sumó el pueblo: campesinos e indígenas “que fueron decisivos para escribir el célebre telegrama: “Las armas del supremo gobierno se han cubierto de gloria”.